Como ocurre con muchas ciudades del interior de la provincia, el nombre de Graneros tiene un origen incierto. En especial, dos historias pelean por su responsabilidad en haber consagrado el nombre de esta localidad. La primera de ellas tiene que ver con la llegada de los colonizadores españoles. Según se cuenta, cuando ingresaron al territorio habrían plantado grandes parcelas de trigo, que llenaban casi todo el lugar. De allí que la región se convirtió en un enorme "granero". La segunda historia remite pretende que el paraje habría sido propiedad del capitán Diego Graneros de Alarcón, uno de los hombres más ricos de la zona. Según esta hipótesis, estas tierras le habrían sido concedidas por el gobernador Luis de Quiñones y Osorio, en agradecimiento por la valentía y el esfuerzo demostrados durante las campañas llevadas a cabo contra los indios Calchaquíes.
Dos historias compiten por ser la que "bautizó" Graneros
SALUDO AL LLEGAR. El origen del nombre Graneros se pierde en el tiempo. LA GACETA / OSVALDO RIPOLL